A veeeeerrr! Por fin me decido a escribirlo. Voy a tener que pensar mucho porque como son mías, seguro que no me doy cuenta de que son manías. Así que haré un esfuerzo. Pero intentaré ser breve. Eso sí, no le pienso pasar el marrón a nadie.
Empiezo:
1 - Me ducho siempre en el mismo orden: me lavo el pelo, me lo aclaro, me pongo suavizante y me peino. Mientras tanto, como tengo que dejarlo reposar (para suavizar, se entiende), me pongo gel en la esponja y me embadurno todo el cuerpo con espuma. Me aclaro a mí misma y luego a mi pelo. Este orden, lo tengo comprovado, es el que me permite optimizar más el tiempo por las mañanas. El objetivo es dormir más. Ducharme, secarme, ponerme crema, vestirme y secarme el pelo me cuesta la friolera de 30 minutos! Superad esto! Que decir tengo que está totalmente automatizado y a veces no sé ni lo que hago (al contrario que algunos, a mí la ducha me despeja poco... hasta que no me tomo el café no me despierto). Pero como tardo un mínimo absoluto de tiempo, puedo estar en la cama un ratillo más!
2 - Tengo que comprovar cuarenta veces antes de irme a la cama que el despertador está puesto, y a la hora que toca. Soy muy maniática con esto. Seguro que es algún trauma infantil.
3 - Soy muy puntual (esto creo que ya lo he dicho alguna vez). Y es porque me pone nerviosa que me hagan esperar. Mejor dicho, me pone de muy mala leche (aunque al cabo de un rato -rato proporcional al tiempo de espera- se me pase). Por eso no me gusta hacer esperar, tampoco. A veces quedo con gente que sé de sobras que es impuntual (MUY impuntual) y me las apaño para llegar tarde. Pero no lo consigo!!!
4 - Me gusta que las cosas estén ordenadas. Esto es un punto a matizar porque en estos momentos mi cuarto estará hecho un desastre (intento que el desastre sea... pequeño!). Pero las zonas comunes del piso me gusta que estén arregladas. Es algo que he aprendido de vivir con gente, para que haya un mínimo de orden. Si no, por experiencia propia, todo acaba siendo un caos. Aunque a veces, según con quién, cuesta mantener ciertos mínimos (según parece, no son absolutos, sino relativos!).
5 - En general, no me gustan las grandes sorpresas. Alguna vez me han organizado una fiesta sorpresa o me han hecho un regalo sorpresa un grupo de gente, y me he puesto muy nerviosa. No me gusta ser el centro de atención sin poder controlar la situación, almenos si no soy yo quien la ha provocado (mmm... creo que me estoy liando!). Y menos aún cuando hay mucha gente. Eso sí, si un amigo tiene un detalle conmigo sí que me gusta. Eso es diferente. Pero si es más a lo bestia (por decirlo de algún modo), no.
Pues ahí queda. Esto es lo que se me ocurre. Poco original? Tal vez, pero tenía que escribir algo! No son cosas extravagantes, yo creo. Pero bueno. Eso sí, como he dicho, no lo paso a nadie. Si a alguien le apetece, que lo haga. Aunque no lo creo... :)
Por cierto! También me gusta subir las escaleras de dos en dos. Y corriendo. O mejor dicho, saltando XD. Aunque esto no sé si es una manía. Es algo que me gusta. Un gusto! :P Ale, me voy pa casa!